EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE JAÉN

Por: Juan Fernández Villaverde (Jaén,Perú).

El 04 de junio del 2022, la provincia de Jaén de Perú celebró su 201º Aniversario de Independencia; ya que, un 04 de junio del 1821, el Gobernador Juan Ignacio Checa y el Vicario Alejandro Crespo y muchos notables de Jaén, decidieron separarse de España, ósea 54 días antes de la independencia de Perú (28 de julio de 1821). Si bien es cierto, el pueblo de Jaén se crea en 1536, pero con el nombre de Nueva Jerez de la Frontera, siendo su fundador Juan Porcel de Padilla (Jerez de la Frontera, Cádiz, España), lo funda en la margen derecha del río Marañón, en la desembocadura del río Chinchipe o Chuquimayo (hoy provincia de Bagua). En 1537, empieza la Guerra Civil entre los conquistadores por el reparto de tierras; ya que, Pizarro se había apoderado del norte del Tawantinsuyo y a su socio Almagro lo habían asignado al sur. Entre las varias escaramuzas y amenazas entre pizarristas y almagristas, por el control del territorio conquistado, Almagro y su ejército decide atacar el Cuzco y toma prisioneros a los hermanos de Pizarro: Gonzalo y Hernando. El Gobernador La Gasca pide apoyo a Porcel, para que luchará en favor de Pizarro y éste se niega y contesta que no desea enfrentar a indígenas contra indígenas. La Gasca, le castiga y le quita el título de fundador, reemplazándole por el Intendente de Huancabamba (Piura) Diego Palomino, natural del municipio de Andújar, de la provincia de Jaén (España).Diego Palomino asume el control de todas las tierras conquistadas por su antecesor. Palomino decide trasladar el pueblo más al norte a la margen izquierda del río Marañón, zona conocida como Yuramarca, donde posiblemente había habitantes Yungas (hoy pueblo la Yunga, del distrito de Santa Rosa). El traslado se realiza porque hay confluencia de 3 ríos: El Marañón, el Chinchipe y el Utcubamba, por lo que sería muy peligroso por el caudal de los ríos; además, de trasladar el pueblo le cambia de nombre, por lo de su tierra natal, llamándole: San Leandro de Jaén”, siendo San Leandro, un santo del siglo XVI y que marcaba en el calendario (En la actualidad hay un camino de San Leandro, que recorre todas las provincias andaluzas, incluido la provincia de Jaén, en España). Palomino no era bien recibido por los indígenas yungas, por tal motivo, se traslada cerca del lugar dos veces donde asentarse y formar su pueblo en semejanza a su tierra natal. Por fin, el 10 de abril de 1549, Palomino consigue un lugar a pocos kilómetros de la Yunga (entre la carretera Puentecillos y Santa Rosa y aquí deciden quedarse y construir su iglesia, un cabildo, un cementerio, una plaza, un círculo romano, instalando 4 molinos de piedra para moler sus granos, así lo describe el S.J e investigador José Martín Cuesta (Extremadura, España), en su libro: “Jaén de Bracamoros” (quien vivió por la zona muchas décadas). Cabe señalar, que en la actualidad existen algunas piezas del MOLINO DE PIEDRA, restos del cementerio, restos de construcciones, cerámica, entre otros, dichos hallazgos se exhiben en el museo del Centro Poblado de Puentecillos, distrito de Santa Rosa. Hoy en día, en dicho lugar se encuentra el caserío El Molino, que hacen pocas décadas, los pobladores del distrito de Santa Rosa, lo crearon a lado del ‘Jaén Viejo’, como lo conocen los lugareños; además, en dicho lugar hay un río llamado también El Molino, que gracias a éste río funcionaban dichos molinos. Después de más de medio siglo, los pobladores deciden abandonar el pueblo, se piensa que el cambio se hizo por las enfermedades del lugar, como el paludismo, la malaria y las torrenciales lluvias. En 1606, los pobladores deciden cambiar el pueblo del lugar, trasladándose a la margen derecha del río Chinchipe (antes Chiquimayo) en la desembocadura al río Marañón, lugar conocido como Tomependa (hoy distrito de Bellavista). En Tomependa, vivieron dos siglos, hasta su último traslado, quedando restos de dicha población, como un santo llamado San Leandro, que se encuentra en la actualidad en el pueblo San Nicolás. En 1805, se realiza el último y definitivo traslado, hacia el Valle de la Quintana (actual ciudad de Jaén) a la margen izquierda del río Amojú o Quebrada Jaén. Este cambio fue autorizado por la Audiencia de Quito (Ecuador); ya que, mediante una solicitud pidieron trasladar el pueblo más cerca a otras ciudades costeras. El 02 de octubre de 1805, El Gobernador de Jaén, Juan Ignacio Checa y el Vicario Alejandro Crespo respectivamente, inician la visita al valle Amojú a conocer el terreno que había sido donado por Don José Marcelo Rojas, seguido de demás ciudadanos notables. Al siguiente día, 03 de octubre, se reparten los solares dejando 3 solares para: La Iglesia, el Ayuntamiento y la Cárcel; se cuenta, que hubieron pobladores que se negaron a cambiarse de lugar. Cabe señalar, que después de instalarse a orillas del río Amojú, también fue un peligro, ya que, en épocas de lluvia el río llegaba hasta la plaza de armas, de ahí que formaron un poblado cerca del centro en la parte alta, llamado `Santa Rosa’, construyendo una iglesia en semejanza al de Tomependa. La evolución histórica de la provincia de Jaén hace 486 años y la llegada de los españoles a Perú, hace 490 años; mientras que, la creación de la ciudad capital de Jaén hace 217 años y 201 años de su independencia de España.

Plano dibujado por Diego Palomino, en 1549